Málaga y Deportivo disputan un partido dramático en La Rosaleda, como lo serán muchos otros de aquí a final de temporada, con tan solo 8 jornadas por disputarse. Dramático sobre todo para el Málaga, que apenas tiene margen de error. El Deportivo, con cinco puntos más, tiene un ligero colchón, aunque una derrota en La Rosaleda le dejaría de nuevo en situación de alerta máxima. Nueve partidos han disputado ambos equipos en terreno malagueño y seis de ellos terminaron en empate. Once años lleva el Deportivo sin caer en La Rosaleda.
El Málaga apela a su estadio para lograr la permanencia. De los ocho partidos que restan, cinco de ellos son en La Rosaleda, con casi todos los efectivos disponibles, salvo Baptista. A un punto de la salvación, el Málaga está muy vivo y los partidos contra rivales directos son vitales. Las esperanzas son las de casi siempre: Rondón y Duda a la cabeza. Al venezolano le acompañará Fernández en la delantera, y junto al portugués, en el centro del campo, actuarán, por lo que parece, Recio, Apoño y Portillo. En la zaga, Gámez, Demichelis, Stadsgaards y Eliseu defenderán a Caballero.
El Deportivo llega a Málaga con la moral por las nubes tras su remontada frente al Mallorca. Ese partido, además, dejó en el aire el debate sobre Valerón. El canario salió en la segunda mitad y el Deportivo le dio la vuelta al gol inicial de Webó. Lotina sabe de su clase, pero recela de su estado físico y su velocidad. El de La Rosaleda es un partido duro y no está claro que Valerón sea titular. Si finalmente juega, Lotina le blindará con Rubén Pérez y Juan Rodríguez, con Guardado acompañando en la fantasía y con Lassad y Xisco buscando el gol.
Lo pita:Pérez Lasa.
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