arim Benzema fue el mejor jugador del Real Madrid en Mestalla. Participó de forma directa en las jugadas de los seis goles blancos, además de estrellar un remate en el travesaño, aún con 0-0. Partiendo desde la izquierda, fue un puñal para la defensa del Valencia, que no halló la forma de frenarle.
Benzema, además, volvió a marcar después de su inoportuna lesión durante un amistoso entre Francia y Croacia, el pasado 29 de marzo. El percance llegó cuando Karim disfrutaba de su mejor momento como jugador del Real Madrid, convertido en pieza clave de su engranaje ofensivo.
Reapareció dos semanas después, en la vuelta de cuartos de Copa de Europa ante el Tottenham, pero no fue hasta ayer cuando volvió a demostrar su jerarquía en el ataque blanco. El franco-argelino suma ya 22 dianas esta temporada: 11 en Liga, 5 en Copa y 6 en Liga de Campeones.
Tras el partido, Benzema daba algunas claves del holgado triunfo blanco en Mestalla: "Nos hemos quitado mucha presión ganando una Copa muy dura. Los no habituales han demostrado que pueden aportar muchas cosas a este equipo".
Y es que el Madrid volvió a presumir de plantilla en Mestalla. Cuatro días después de la final de Copa, sólo dos jugadores repitieron en el once blanco. Pero el hecho de considerar a Benzema, Higuaín o Kaká suplentes es, cuando menos, discutible. "Tenemos por delante un mes crucial. En Valencia hicimos un partido fantástico, y por eso logramos seis goles".
La contundencia del triunfo blanco sorprendió incluso a los propios madridistas: "No esperábamos un resultado tan abultado porque el Valencia es un gran equipo, pero el partido se nos puso muy a favor después de una gran primera parte. Luego acusamos el cansancio, pero fue una gran tarde para nosotros", concluye el francés.
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